¿Cuáles son los mejores destinos culturales del mundo?

Para el ser humano, el comprender, conocer y descubrir son parte vital para el desarrollo y crecimiento, ya que, explorando y descubriendo sobre nuevos conocimientos, habilidades o destrezas permiten ampliar no solo la mente, sino también brindar una nueva perspectiva sobre la realidad del mundo y lo que ha sido la historia para forjar una sociedad entera.

Explorar nuevas culturas, historia y tradiciones de los países del mundo permite crear un mayor entendimiento de las sociedades, de aprender nuevos valores y pensar de forma diferente, más ampliada y hasta con cierto amor por el descubrimiento.

Sin embargo, es cierto que para explorar cada ciudad o país del mundo se necesitará más de un viaje y quizá toda la vida para comprender, conocer y seguir explorando muchísimas culturas.

Tener una guía a la mano de cinco países podrá aligerar muchísimo este proceso al momento de viajar y conocer, así no se tendrá que pensar sobre a cuál ir primero y cuáles considerar en un primer viaje: lo más significativo es vivir una experiencia rica en descubrimientos, conexiones con la comunidad y el lugar y permitirse sorprenderse y deleitarse.

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Cinco mejores destinos culturales para tu primer viaje

Este top de los cinco mejores destinos culturales pueden tener el orden que se prefiera para visitar, sin embargo, estos pueden ser los primeros a visitar si se desea tener una primera experiencia conociendo un poco más del mundo y las sociedades que existen desde hace bastante tiempo siendo, hoy día, una muestra viviente de evolución.

La historia envuelve al mundo y a cada comunidad con elementos típicos que han servido para forjar a todo un pueblo en actitudes, costumbres, valores y enseñanzas.

Bastará quizá para un primer viaje tener un guía turístico que pueda narrar más sobre los espacios a visitar en cada país con el fin de enriquecer la experiencia, entender lo que se está viviendo y, sobre todo, que hable sobre puntos de interés cultural, histórico o social.

De esta forma, la experiencia será incluso mejor, ya que muchos de estos países tendrán un idioma totalmente diferente al nativo o incluso se pueda encontrar modismos coloquiales que no se manejen y delimiten la comprensión de la experiencia completa.

Foto: Nappy

• La Habana, Cuba: Reconocida por la Unesco como un patrimonio cultural, La Habana tiene una cultura rica, jovial y sorprendente, puesto que muchos consideran este destino cultural como uno de los pocos que rememora el pasado gracias a sus calles repletas de edificios coloniales deteriorados y en buen estado que dan la ilusión de un viaje en el tiempo a un año lejano.

Sin duda, esta cultura tan jovial, llena de buena música, arte y los ánimos tan alegres de la gente de su pueblo te hará sentir en una experiencia única.

Foto: Matthias Oben

• Estambul, Turquía: un destino totalmente diferente al anterior, esta locación en donde el Oriente se encuentra con el Occidente te harán deleitarte, ya que está ubicada geográficamente en el cruce entre Europa y Asia, por lo que está culturalmente influenciada por estos.

Así se puede encontrar elementos arquitectónicos de gran interés no solo por pertenecer a diferentes imperios sino por la historia que hay en ellos, por lo que se encontrará a primera mano la evolución y convergencia de esta cultura en diferentes ámbitos como: la cocina, la identidad, el arte, la música y muchos otros elementos.

Foto: Fatih Yavaşoğlu

• Atenas, Grecia: conocido como el origen de las civilizaciones occidentales, Atenas es un destino cultural de gran interés y relevancia por sus templos y ruinas que abundan en gran parte del territorio conectándolo enormemente con la historia que se conoce en el occidente por estos grandes pensadores y dramaturgos que han forjado la historia con sus pensamientos.

Asimismo, no solo se podrá encontrar estos puntos de interés dentro de este viaje, sino que también se podrá conocer cómo ha evolucionado esta cultura local dentro de lo ambiguo y lo nuevo en un ambiente pintoresco y refrescante.

Foto: Jimmy Teoh

• Marrakech, Marruecos: con su principal punto de interés llamado La Medina, el cual es un gran laberinto de calles históricas y de un mercado lleno de vida, Marrakech, mejor conocida como “La ciudad roja”, ofrece una perspectiva totalmente vívida de la cultura marroquí por su actividad, sus colores, olores y su gente.

Sus alrededores están conformados tanto por sus calles y el mercado como por jardines, mezquitas y palacios. Definitivamente, es un destino cultural que nutrirá en todas las formas posibles a vivir una experiencia única para conocer el legado que allí se vive diariamente en sus calles y en sus estructuras.

Foto: Deborah Seychell

• Kioto, Japón: al llegar a este destino lo primero que se notará es el gran arraigo a la historia que vive, puesto que, al caminar las calles, encontrarás edificios antiguos de madera que son parte del legado arquitectónico antiguo de la ciudad niponés. Parte de este legado también se ve dentro de las famosas casas de té para pasar un tiempo agradable conociendo esta gran ciudad y las ceremonias que se realizan para tomar el té.

No solo se conocerá la disciplina y el arte que conlleva esta ceremonia o las tradiciones que se esconden en estas calles sobre la cultura japonesa, está repleta de experiencias únicas solo si se está abierto a experimentarlas gracias a la calma de sus jardines zen, el conocer un nuevo idioma o incluso conectarse con ese pasado que tanto resalta en la ciudad.

Foto: Leih Quimson

De esta manera se finaliza esta guía, no sin antes destacar la importancia de siempre realizar una investigación previa para conocer la cultura, el respeto que existe a ciertos elementos e ir con la idea de vivir una experiencia grata para poder consumar con gran felicidad cada uno de los puntos de este viaje.

Conocer nuevas culturas, nuevas personas y tener un acercamiento con lo desconocido hará en la mente y pensamientos de cualquier persona una evolución muy grata para su crecimiento, y es que más allá de enfrentar miedos, se conecta con el alma, con el amor y el respeto a comprender.