Cataluña regula alquiler temporal y por habitaciones

El Parlament aprueba una ley que regula el alquiler de temporada y por habitaciones para aplicar la limitación de precios en zonas tensionadas y evitar fraudes contractuales

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cataluna-parlament-aprueba-ley-alquiler|Foto: El Mundo/Rubén Moreno
cataluna-parlament-aprueba-ley-alquiler|Foto: El Mundo/Rubén MorenoEl Parlament aprueba una ley que regula el alquiler de temporada y por habitaciones para aplicar la limitación de precios en zonas tensionadas y evitar fraudes contractuales

El Parlament de Cataluña ha aprobado este viernes una ley pionera que regula el alquiler de temporada y por habitaciones, con el objetivo de aplicar la contención de precios en las zonas tensionadas y frenar prácticas fraudulentas en el mercado inmobiliario.

La norma, respaldada por PSC, ERC, Comuns y la CUP, busca impedir que los arrendadores recurran a contratos temporales para esquivar los límites de renta establecidos por la Ley estatal de vivienda.  

En ciudades como Barcelona, el alquiler temporal ya representa una tercera parte de los contratos, desplazando a los arrendamientos residenciales tradicionales.

Con esta medida, el bloque de izquierdas culmina un largo proceso legislativo que pretende reforzar la protección de los inquilinos en un mercado marcado por la presión de los precios.  

La norma recibió hace dos semanas el aval del Consejo de Garantías Estatutarias (CGE), tras las consultas de Junts per Catalunya y el PP, lo que retrasó su aprobación definitiva.

El CGE solo expresó dudas sobre la extensión de la protección a las viviendas de protección oficial (VPO) en zonas tensionadas, aunque el Govern de Salvador Illa defiende su legalidad.

Se estima que esta medida beneficiará a unos 35.000 pisos que, de otro modo, habrían pasado al mercado libre. El PP ya ha anunciado que presentará un recurso ante el Tribunal Constitucional.  

subida-alquileres-diciembre-espana|Foto: El Diario.es/Europa PressLos alquileres suben 2,3% en diciembre

Contexto político

El texto legal, que en algunos puntos contó con el apoyo de JxCat, establece además un registro de grandes tenedores, amplía los derechos de tanteo y retracto de la Administración y eleva al 50% la reserva de suelo para vivienda protegida en Cataluña.

Solo quedarán fuera de esta regulación los alquileres destinados a uso vacacional y de ocio, que podrán justificar su carácter turístico mediante documentos como la tasa de pernoctación.  

La ley considera que cualquier contrato “destinado a la satisfacción de la necesidad de vivienda” debe ser tratado como permanente, independientemente de su duración, y vinculado automáticamente a la contención de rentas si se encuentra en una zona tensionada.

De este modo, solo se reconocerán como alquileres de temporada aquellos que acrediten un uso turístico o recreativo.  

Alquiler por habitaciones

En el caso del alquiler por habitaciones, la norma establece que la suma de las rentas no podrá superar el precio máximo fijado para el inmueble completo. Por ejemplo, si el tope para un piso es de 900 euros, ninguna de sus tres habitaciones podrá alquilarse por más de 300 euros.  

“La vivienda debe ser un derecho y no una fuente de angustia”, defendió la consejera de Vivienda y portavoz del Govern, Sílvia Paneque, durante el debate parlamentario.

Junts apoyó la regulación del mercado, pero rechazó la contención de precios, una postura compartida por PP, Vox y Aliança Catalana.  

Antecedentes

El camino legislativo comenzó en abril, cuando el PSC alcanzó un acuerdo con ERC, Comuns y la CUP para aprobar un decreto de medidas urgentes en vivienda y urbanismo, que posteriormente se tramitó como proyecto de ley.

En la legislatura anterior, sin embargo, un texto similar fue rechazado por la abstención socialista y el voto en contra de JxCat, PP, Vox y Ciudadanos.  

Cataluña fue la primera comunidad autónoma en aplicar la contención de rentas de la Ley de vivienda en zonas tensionadas.

Para que un municipio o barrio obtenga esta catalogación debe cumplir al menos uno de dos requisitos: que el coste de hipoteca o alquiler más gastos básicos supere el 30% de la renta media de los hogares, o que el precio de compra o alquiler haya crecido tres puntos por encima del IPC autonómico en los últimos cinco años.  

Con información de El Mundo 

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