Villamanín vive conflicto tras el Gordo de Navidad 2025

La Lotería de Navidad es una de las citas más importantes para los españoles durante las fiestas decembrinas. Los resultados se esperan con esperanza y devoción, una oportunidad que genera unión y celebración en comunidades enteras y vecinos, no solo en las familias.

Este año, la alegría se ha visto empañada por un error en la venta de participaciones en el pueblo de Villamanín, en León, una situación que ha causado conflictos, reuniones tensas, propuestas de acuerdos y amenazas de denuncias.  

El inicio de la polémica

El 22 de diciembre de 2025, el número 79.432 resultó agraciado con el Gordo de la Lotería de Navidad, repartiendo ilusión en Villamanín, un municipio leonés de menos de 1.000 habitantes.

La comisión de fiestas local había vendido participaciones del número premiado, lo que convirtió al pueblo en epicentro de la celebración.  

Sin embargo, la euforia se transformó pronto en preocupación. Según RTVE, la comisión de fiestas de Villamanín reconoció que había vendido 50 papeletas de más respecto a los décimos oficiales adquiridos, lo que generó un desfase de unos 4 millones de euros en premios que no podían cobrarse.

Este error ha desencadenado el conflicto actual en el municipio leonés, empañando la celebración del Gordo de Navidad.  

El Gordo de Navidad 2025 reparte 2.772 millones en premios

Reuniones y propuestas

La situación llevó a una reunión multitudinaria en el Hogar del Pensionista, donde más de 100 vecinos intentaron buscar soluciones. La comisión propuso renunciar a sus propios premios y aplicar una quita del 10% a cada participación para que todos pudieran cobrar algo. Sin embargo, muchos afectados consideraron injusta la medida y comenzaron a plantear denuncias.  

El ambiente en el pueblo se volvió tenso. Según Libertad Digital, las discusiones entre vecinos han reavivado viejas rencillas familiares y personales. Incluso se han producido escenas de tensión en espacios cotidianos como supermercados.  

Riesgo de denuncias

Los jóvenes de la comisión, de entre 18 y 25 años, han limitado su presencia pública y emitido un comunicado en el que aseguran estar trabajando en un acuerdo “justo, transparente y con garantías legales”.

Algunos juristas advierten que, si un solo afectado denuncia, los miembros de la comisión podrían ser condenados a pagar los 4 millones pendientes antes de marzo de 2026.  

Otros, como el músico Ramoncín, han aconsejado públicamente a los vecinos aceptar el acuerdo, ya que los organizadores podrían declararse insolventes. El alcalde de Villamanín, Félix Álvaro Barreales, ha pedido consenso y comprensión hacia los jóvenes organizadores, aunque el futuro del acuerdo sigue siendo incierto. 

Conclusión

Lo que comenzó como una fiesta colectiva por el Gordo se ha convertido en una crisis social y legal que amenaza con prolongarse en los tribunales. Villamanín, que celebró con entusiasmo el premio más esperado de la Navidad, ahora enfrenta el reto de resolver un conflicto que ha puesto a prueba la convivencia y la confianza entre vecinos.