El BOE confirma recorte en nóminas desde enero 2026

El Boletín Oficial del Estado (BOE) ha confirmado un cambio que afectará directamente a millones de trabajadores en España: a partir del 1 de enero de 2026, las nóminas reflejarán una reducción derivada del incremento en la cotización del Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), destinado a reforzar la sostenibilidad del sistema de pensiones.  

El MEI, vigente desde 2023, se aplica como un porcentaje adicional sobre la base de cotización y tiene como objetivo alimentar el Fondo de Reserva de la Seguridad Social, conocido como la “hucha de las pensiones”.

Esta medida busca garantizar el pago de las jubilaciones futuras, especialmente de la generación del baby boom, y estará en vigor, al menos, hasta 2032, con posibilidad de extenderse hasta 2050.  

En 2025, la aportación del MEI es del 0,8%, repartida entre un 0,67% a cargo de la empresa y un 0,13% del trabajador. Sin embargo, desde enero de 2026, el porcentaje subirá al 0,9%, con un reparto de 0,75% para las empresas y 0,15% para los empleados.

Este incremento, aunque aparentemente pequeño, se traducirá en deducciones visibles en las nóminas. 

Ejemplos prácticos

El BOE detalla cómo se aplicará este ajuste en distintos salarios. Con un sueldo de 1.400 euros, la aportación total será de 12,60 euros, de los cuales el trabajador asumirá 2,10 euros.

Para un salario de 2.000 euros, la deducción ascenderá a 18 euros, con 3 euros a cargo del empleado. En el caso de un salario de 2.700 euros, la aportación alcanzará los 24,30 euros, de los cuales 4,05 euros corresponderán al trabajador.  

Nuevo impuesto en las nóminas de los trabajadores a partir de enero

Este porcentaje se aplica sobre la base de cotización, lo que significa que quienes perciban salarios más altos verán una mayor deducción en términos absolutos. 

Evolución del MEI

La subida del MEI está diseñada de forma gradual. En 2027 se elevará al 1%, en 2028 al 1,10% y en 2029 al 1,20%, porcentaje que se mantendrá hasta 2050. Durante ese período, la distribución será más equilibrada: 0,6% para las empresas y 0,6% para los trabajadores.  

No obstante, la norma contempla excepciones. Los jubilados que continúen trabajando bajo la modalidad de jubilación activa, los empleados en programas de formación o contratos de prácticas, así como quienes cotizan únicamente por contingencias profesionales, estarán exentos de esta aportación. 

Sostenibilidad del sistema

El reto demográfico es uno de los grandes desafíos de España. En la próxima década se incorporarán al mercado laboral alrededor de 1,8 millones de jóvenes, mientras que más de 5,3 millones de personas mayores de 55 años se retirarán. Este desequilibrio obliga a reforzar los ingresos de la Seguridad Social.  

En este sentido, Francisco Mesonero, director general de la Fundación Adecco, advierte: “En un país con un acusado déficit de relevo generacional, apostar por el talento sénior no es una opción, sino una necesidad. Retener o reenganchar a los profesionales mayores de 50 años no sólo amplía la base de talento disponible, sino que ayuda a sostener la productividad y facilita la transferencia de conocimiento entre generaciones”.  

El MEI se presenta así como una herramienta clave para garantizar la sostenibilidad del sistema de pensiones, aunque su impacto inmediato será una reducción en las nóminas de millones de trabajadores.  

Con información de OK Diario