Chip sexual: impacto en la sexualidad humana

El chip sexual, también conocido como "chip de la juventud", es un implante hormonal que busca estimular la libido y mejorar la vida sexual. Si bien su uso se ha extendido en los últimos años, su impacto en la sexualidad humana aún genera debate

Salud y BienestarSofía MonteverdeSofía Monteverde

El chip sexual, también conocido como "chip de la juventud", es un implante hormonal que busca estimular la libido y mejorar la vida sexual. Si bien su uso se ha extendido en los últimos años, su impacto en la sexualidad humana aún genera debate.

También conocido como "chip de la juventud", este implante tiene el tamaño de un grano de arroz  que se coloca debajo de la piel, liberando pequeñas dosis de testosterona o estrógeno de forma gradual durante un período de 3 a 6 meses.

¿Cuántos tipos de chip sexual existen?

  • Chip sexual para hombres: Este chip libera testosterona, la hormona sexual masculina responsable del deseo sexual, la erección y la masa muscular.
  • Chip sexual para mujeres: Este chip libera estrógeno, la hormona sexual femenina responsable del deseo sexual, la lubricación y la fertilidad.

Chip sexual - salud

Como sabemos, los chips sexuales, han venido a cambiar la forma en que abordamos la libido y el bienestar en general. Pero, ¿Sabías que existen diferencias importantes entre los tipos de chips que hay?

El chip diseñado para hombres suele estar cargado con testosterona, esa hormona clave en el universo masculino. Mientras que el chip para mujeres puede variar más: puede tener testosterona, estrógeno, progesterona o una mezcla de las tres, dependiendo de lo que necesite cada mujer en particular.

*Lee también: Salud sexual: cómo disfrutarla y cuidarla a cualquier edad

Ahora, hablemos de dosificación. ¿Cómo se determina la cantidad de hormonas que necesitas? Esta es una respuesta personalizada, se tienen en cuenta cosas como  edad, sexo, peso, altura y cualquier condición médica que tengas. Por ejemplo, los hombres tienden a necesitar una dosis mayor de testosterona que las mujeres, pero esto varía según cada individuo.

Así que, estos chips sexuales no son una talla única para todos. Están diseñados para adaptarse a las necesidades específicas de cada persona, lo que los convierte en una opción interesante para mejorar la salud sexual y el bienestar en general.

¿Para qué sirve el chip sexual?

Su objetivo principal es mejorar la libido y el bienestar general, tanto en hombres como en mujeres. Ahora bien, en hombre libera testosterona, la principal hormona sexual masculina. Y, en mujeres, contiene testosterona, estrógeno, progesterona o una combinación de las tres, dependiendo de las necesidades individuales.

¿Cómo funciona el chip sexual?

Cuando se trata de la implantación de estos chips, el proceso es bastante sencillo. Se realiza una pequeña incisión en la piel, generalmente en la zona de la cadera o el abdomen, y ahí es donde se coloca el chip. Lo mejor de todo es que este procedimiento se hace de forma ambulatoria, así que no tienes que preocuparte por pasar horas en un quirófano ni por la anestesia general.

20240308_054255_0001

Beneficios del chip sexual

Una de las principales ventajas es el aumento del deseo sexual tanto en hombres como en mujeres. Esto puede contribuir a una mayor intimidad y conexión en las relaciones. Además, el chip puede mejorar la función sexual. En los hombres, puede ayudar a mejorar la erección, mientras que en las mujeres puede incrementar la lubricación, lo que hace que las relaciones sean más cómodas y placenteras.

Otro aspecto importante es que las hormonas liberadas por el chip pueden proporcionar un impulso de energía y vitalidad. Esto puede ayudar a combatir la fatiga y el agotamiento, permitiendo sentirse más enérgico durante el día. También se ha observado que el chip puede tener un impacto positivo en el estado de ánimo y la autoestima.

Con un aumento en la producción de hormonas, es posible experimentar una mejora en el estado de ánimo, sintiéndose más feliz y seguro.

*Lee también: Operaciones médicas a distancia: una realidad que beneficia a todos

Sobre el rendimiento físico, el chip puede mejorar la fuerza muscular y la resistencia, lo que puede ser beneficioso para la actividad física diaria. Además, se ha sugerido que el chip puede ayudar a mantener la salud ósea, lo que podría ser especialmente beneficioso para prevenir la osteoporosis en personas mayores.

Y, por último, pero no menos importante, el chip puede mejorar la salud de la piel, aumentando la hidratación y elasticidad.

Riesgos y efectos secundarios 

Así como hay muchos beneficios, también existen riesgos, como el aumento del acné, cambios de humor, presión arterial alta, migrañas, dolor en las mamas, pérdida de cabello, crecimiento de vello facial, agrandamiento de la próstata, disminución de la producción de esperma y un pequeño riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer. Además, pueden surgir complicaciones como reacciones alérgicas, infecciones en el lugar de implantación, desplazamiento del chip y dificultad en su extracción.

Impacto del chip sexual en la sociedad

Cuando hablamos de salud sexual, aumenta la libido tanto en hombres como en mujeres, mejorando la satisfacción sexual y la calidad de vida en pareja. Además, mejora la función sexual, promoviendo la erección en hombres y la lubricación vaginal en mujeres. También regula los niveles hormonales, aliviando síntomas asociados con la menopausia y la andropausia, como sofocos, sequedad vaginal y pérdida de masa muscular.

20240308_054255_0000

Respecto al bienestar general, las hormonas liberadas por el chip aumentan la energía y la vitalidad, y mejoran el estado de ánimo al reducir el estrés, la ansiedad y los síntomas depresivos. Además, fortalecen los músculos y los huesos.

Y, en temas sociales y éticos, el chip contribuye a la igualdad sexual al mejorar la vida sexual de las mujeres y empoderarlas en sus decisiones sobre salud sexual.

Futuro del chip sexual

En cuanto a posibles avances, se espera el desarrollo de nuevos chips con una dosificación hormonal más precisa, menos efectos secundarios y una duración prolongada. Asimismo, se exploran opciones para personalizar el tratamiento según las necesidades individuales de cada persona, y se investiga su aplicación en áreas como la menopausia, la osteoporosis y la depresión.

No obstante, existen desafíos significativos por enfrentar. Por un lado, los chips sexuales aún no han sido aprobados por las autoridades sanitarias en muchos países, lo que limita su disponibilidad. Además, el alto costo del chip podría dificultar su accesibilidad para algunas personas. Asimismo, es importante abordar preocupaciones éticas relacionadas con la medicalización de la sexualidad, la presión social y la discriminación.

Te puede interesar
Lo más visto

Suscríbete al newsletter para recibir periódicamente las novedades en tu email